miércoles, 27 de octubre de 2010

Esperanza


El viento sopla sobre mi rostro,
suave… cual caricia de mi amado.
Cierro los ojos he imagino
que le tengo a mi lado.

Los días pasan, mas no en vano,
van dejando huella en mi corazón.
Me hace falta su presencia,
añoro su sonrisa, su mirada,
sus palabras y su voz.

Vuela el tiempo
como vuela el viento.
Oh, el tiempo…
cual verdugo implacable
va dejando huella.

Mi rostro se marchita
mi cuerpo se agota,
pero el amor que guarda,
ese amor que ilumina el alma,
ese, crece más cada día.

No te rindas corazón,
no dejes que el tiempo te robe
la esperanza de ver a tu amado,
y el anhelo de estar a su lado.

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